El Impenetrable es uno de los últimos
bosques nativos continuos que quedan en nuestro país. Su imponente nombre se
debe a la cerrada vegetación que lo caracteriza y la dificultad para
atravesarlo, constituye uno de los últimos refugios de bio-diversidad de la región
chaqueña. A pesar de la Ley de Bosques, las topadoras siguen desmontando sin
descanso.
Un bosque impenetrable
El Impenetrable es una amplia zona de más de 4.000.000 de
hectáreas de bosques nativos de la región chaqueña semiárida, ubicadas en el
nor-oeste de la provincia del Chaco. Comprende también una porción del este de
Salta, el oeste de Formosa y el nor-este de Santiago del Estero. Sus
principales ríos son el Bermejo, el Teuco y el Bermejito.
Las riquezas del bosque
La flora característica es el
quebracho colorado y el blanco, el algarrobo, el palo santo y el urungay, entre
otros. Entre los animales que habitan la región se encuentran el tatú carreta,
el oso hormiguero y el yaguareté, todos ellos en peligro de extinción. A ellos
se suman, entre otros, el puma, el loro hablador, el caimán overo y el yacaré negro.
Una fiera en
peligro
El yaguareté (verdadera
fiera en guaraní) es una de las especies mas amenazadas por la fragmentación y
la disminución de su hábitat y por la caza furtiva. Es el felino mas grande del
continente americano y tercero a nivel mundial, después del tigre de bengala y
el león.A principios del siglo XX habitaba desde el sur de Estados Unidos hasta
la Patagonia argentina. Hoy solo ocupa el 15 % de aquella distribución. En
Argentina se estima que quedan menos de 200 ejemplares distribuidos entre la
selva Misionera, la selva de Yungas y el Impenetrable.
La gente de El Impenetrable
La mayoría de
los habitantes son campesinos, pequeños productores rurales e indígenas tobas y
wichis. En la región habitan unas 100.000 personas. La mayoría de los wichis se
dedican a la recolección de frutos y miel del monte, la caza y la pesca. Los
tobas centran su actividad en la caza, la pesca y la agricultura (algodón, maíz
y mandioca), cultivan la tierra en pequeñas parcelas.
La amenaza de la
ganadería intensiva
En la provincia
de Chaco, la Ley de Bosques (reclamada su reglamentación por Greenpeace y otras
70 organizaciones ambientales) se encuentra en peligro. El avance de la ganadería
intensiva pone en serio riesgo al Impenetrable y viola la ley.
Desde principios
del siglo XX en la región chaqueña se ha desarrollado la ganadería bajo monte. Miles de familias campesinas
e indígenas basan su sustento en la producción caprina y vacuna. Años de
sobre-pastoreo y tala irracional han degradado los bosques, sin embargo, es
posible recuperarlos mediante un plan de manejo sustentable.
A mediados de la década del 90 creció fuertemente la
superficie cultivada para soja transgénica y la ganadería, ubicada
tradicionalmente en la zona pampeana, fue empujada hacia el norte del país.
Actualmente
Chaco cuenta con 2.600.000 cabezas de ganado y se propone duplicar ese número
para 2015. Para lograrlo, el gobierno planea expandir la frontera agropecuaria llevándola
a 2.000.000 de hectáreas contra las actuales 1.200.000.
Estos planes de expansión
ponen al Impenetrable al borde de la desaparición y, con él, a la fauna que lo
habita, mientras que, a quienes viven en él, los condena a la pobreza extrema.
Fuente:
Greenpeace Argentina, www.greenpeace.org.ar
